La razón principal que alega Podemos para rechazar la propuesta socialista de reforma de la ley del solo sí es sí es que ese texto, al agravar las penas para las agresiones sexuales cometidas con violencia o intimidación, dejaría dañado "el corazón" de la norma, que, según las responsables del Ministerio de Igualdad, es castigar todo acto sexual cometido sin consentimiento de una de las partes.